Vivo en un mundo que no me gusta y que tampoco entiendo, donde la juventud se autodestruye en vez de prosperar. Sueño con abrazar a mi familia, lamer promesas, besar a labios dulces de palabras llenas. El capitán saltó por la proa mientras en lo alto del mástil meditaba el poeta. Lo inconmensurable afín a tu voluntad, te desee en mejores boleros pero ahora veo que no fuiste grácil. Sigo escribiendo pero eso no hace que me vuelvas a pensar, bailabas conmigo hasta que fue silueta. Espanto mis fantasmas e imagino que me lees intentando comprender como llego a cada situación que describo. A continuación descubres que somos dos incomprendidos. Libero las chispas de la lumbre que se cosen a la pana y destruyo calendarios guardando portadas santas. Exploto en hordas de silencio y vigilo a enemigos desde el cerco en tirantes y calzoncillos. No se desvaneció la esperanza pero tampoco dejó de ser angustia, butacas vacías de magnánimas estancias, guardadas en sobres declaraciones que n